sábado, 26 de octubre de 2013

P.U.E. 6º - UNIDAD II



Ética y moral, desde la etimología

La palabra ética proviene del griego êthos y significaba, primitivamente, estancia, lugar donde se habita. Posteriormente, Aristóteles afinó este sentido y, a partir de él, significó manera de ser, carácter. Así, la ética era como una especie de segunda casa o naturaleza; una segunda naturaleza adquirida, no heredada como lo es la naturaleza biológica. De esta concepción se desprende que una persona puede moldear, forjar o construir su modo de ser o êthos.

¿Cómo se adquiere o moldea este êthos, esta manera de ser? El hombre la construye mediante la creación de hábitos, unos hábitos que se alcanzan por repetición de actos. El êthos o carácter de una persona estaría configurado por un conjunto de hábitos; y, como si fuera un círculo o una rueda, éste êthos o carácter, integrado por hábitos, nos lleva en realizar unos determinados actos, unos actos que provienen de nuestra manera de ser adquirida.

La palabra moral traduce la expresión latina moralis, que derivaba de mos (en plural mores) y significaba costumbre. Con la palabra moralis, los romanos recogían el sentido griego de êthos: las costumbres también se alcanzan a partir de una repetición de actos. A pesar de este profundo parentesco, la palabra moralis tendió a aplicarse a las normas concretas que han de regir las acciones.

Así, pues, desde la etimología, hay poca diferencia entre ética y moral: una y otra hacen referencia a una realidad parecida. Pero hoy, pese a que a menudo se usan de manera indistinta como si fuesen sinónimos, se reconoce que tienen significados divergentes.

Ética y moral, hoy: dos niveles diferentes

Tan antiguo como la misma humanidad es el interés por regular, mediante normas o códigos, las acciones concretas de los humanos; en todas las comunidades, en todos los pueblos, sociedades o culturas encuentran prescripciones y prohibiciones que definen su moral.

"En cada comunidad, incluso en la tripulación de un barco pirata, hay acciones obligadas y acciones prohibidas, acciones loables y acciones reprobables. Un pirata tiene que mostrar valor en el combate y justicia en el reparto del botín; si no lo hace así, no es un ‘buen’ pirata. Cuando uno hombre pertenece a una comunidad más grande, el alcance de sus obligaciones y prohibiciones se hace más grande; siempre hay un código al cual se ha de ajustar bajo pena de deshonra pública." Bertrand Russell Sociedad humana: ética y política.

Ahora bien, junto al nacimiento de la filosofía apareció otro tipo de interés, el de reflexionar sobre las normas o códigos ya existentes, comparándolos o buscando su fundamento. Estos dos diferenciados niveles de interés o de actividad humana constituyen lo que conocemos hoy, respectivamente, por moral y ética. Veamos.

La moral es un conjunto de juicios relativos al bien y al mal, destinados a dirigir la conducta de los humanos. Estos juicios se concretan en normas de comportamiento que, adquiridas por cada individuo, regulan sus actos, su práctica diaria. Ahora bien, ni las normas o códigos morales se proclaman como el código de circulación, ni cada persona asume o incorpora automáticamente el conjunto de prescripciones y prohibiciones de su sociedad, ni cada sociedad o cultura formulan los mismos juicios sobre el bien y el mal. Es por todo eso que la moral a menudo es un conjunto de preguntas y respuestas sobre qué debemos hacer si queremos vivir una vida humana, es a decir, una vida no con imposiciones sino con libertad y responsabilidad.

La ética, por otro lado, es una reflexión sobre la moral. La ética, como filosofía de la moral, se encuentra en un nivel diferente: se pregunta por qué consideramos válidos unos y no otros comportamientos; compara las pautas morales que tienen diferentes personas o sociedades buscando su fundamento y legitimación; investiga lo qué es específico del comportamiento moral; enuncia principios generales o universales inspiradores de toda conducta; crea teorías que establezcan y justifique aquello por el que merece la pena vivir.

La moral da pautas para la vida cotidiana, la ética es un estudio o reflexión sobre qué origina y justifica estas pautas. Pero las dos, si bien son distinguibles, son complementarias. Del mismo modo que teoría y práctica interaccionan, los principios éticos regulan el comportamiento moral pero este comportamiento incide alterando los mismos principios. A menudo los conflictos de normas morales que aparecen cuando tenemos que tomar decisiones son el motor que nos impulsa a una reflexión de nivel ético. Es por ello que Aranguren, reconociendo la vinculación entre teoría y práctica, llama a la ética moral pensada y a la moral, moral vivida.

Estamos a nivel moral cuando:

Cumplo una promesa hecha ayer pese a que hoy me doy cuenta de que su cumplimiento me crea problemas.

Ayudo voluntariamente a un compañero de clase si bien me arriesgo a herir su orgullo.

Decido si tengo que ser o no sincero con un compañero de clase que parece quiere ser amigo mío.

Rechazo robar la calculadora de un compañero de clase sabiendo que nadie me ve.

Estamos a nivel ético cuando:

Razonamos que los pactos han de cumplir siempre, del contrario, en lugar de acuerdos entre amigos, tendríamos que hacer contratos legales.

Me pregunto sobre qué tiene más valor moral, la intención que inspira un acto o los resultados que con él se obtienen.

Reflexiono sobre valores, preguntándome si el valor de la autenticidad es preferible el valor de la amistad.
Tengo presente la máxima o regla de oro: "No hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti".

P.U.E. 6º - UNIDAD I : METAFÍSICA

¿EXISTE DIOS? LA RESPUESTA DE SANTO TOMÁS DE AQUINO.

Nació En 1221 y murió en 1274 DC. Santo Tomás pertenece junto con Aristóteles a la línea de filósofos que argumentan a favor de la existencia de Dios determinándolo como la Causa Primera de todo lo que existe.
Sus obras fundamentales son: “Cuestiones Disputadas”, “Suma contra los Gentiles”, “Suma Teológica”.
Para demostrar la existencia de Dios, Santo Tomás utiliza cinco caminos o vías. Las vías sor argumentos, es decir un conjunto de razones o de pruebas para apoyar una conclusión. En este caso son las razones que  Tomás da para demostrar que Dios existe. Cada una de las vías mantiene una estructura fija. Estructura:
A) Un punto de partida, un hecho o aspecto del mundo físico.  
B) La aplicación de dos principios lógicos:
1) el de la causalidad (todo tiene una causa) y 2) el de la imposibilidad de prolongar la serie de causas hasta el infinito (se refiere a las causas subordinadas, a aquellas que en el acto mismo de ejercer su causalidad dependen de una causa superior).
 C) Un punto de llegada, la conclusión del argumento, un Primer Ser, Causa Primera,  en uno de cuyos aspectos se encuentra la explicación definitiva del hecho o aspecto del mundo del cual partimos. Ese Ser es DIOS.

Análisis de cada una de las vías:

Vía  primera, “Del movimiento”.
Santo Tomás observó que el movimiento de un móvil obedece a la acción de un motor. Todo lo que se mueve está en potencia (posibilidad de  cambio) respecto a aquello hacia lo cual se mueve.
Es imposible que una cosa mueva y sea movida respecto a lo mismo, o que se mueva a sí misma, por lo tanto el movimiento es contingente (que es de una manera pero puede ser de otra) y su existencia se explica en el movimiento de otro ser (causa del movimiento, motor). Esta cadena causal no se puede tomar hasta el infinito porque de ser así, no existiría un primer motor  y tampoco movimiento alguno, cosa que es evidentemente falsa.
En conclusión admitimos un primer motor, un Motor Inmóvil, que mueve sin ser movido. Este Motor Inmóvil es Dios.

Vía segunda, “De las causas  eficientes”. En el mundo físico encontramos un orden de causas eficientes, sin embargo no es posible que una cosa sea cusa de sí misma, porque entonces tendría que ser anterior a ella misma, cosa evidentemente falsa. Tampoco es posible que esta serie de causas sea infinita, porque no existiría una primera causa eficiente ni tampoco efecto último, ni causas eficientes intermedias, cosa también evidentemente falsas. Por lo tanto es necesario admitir una Causa Primera, una causa incausada. Dios es la Causa Primera de todo cuanto existe.

Tercera vía, “De lo posible y de lo necesario”. En el mundo existen cosas que pueden ser o no ser, es decir seres contingentes. Es imposible que algo que existe lo haya hecho por siempre. Lo que tiene posibilidad de existir solo existe a partir de algo ya existente. Por lo tanto no se puede prolongar esta serie de cosas posibles, porque de ser así, no habría seres contingentes, ni nada existiría, cosa que es evidentemente falsa. No todos los seres son posibles o contingentes, sino que es preciso que haya un Ser Necesario. Este ser tiene en sí mismo la causa de su necesidad. Este ser absolutamente necesario es Dios.

Cuarta vía, “De los grados de perfección”. En el mundo observamos que hay cosas más o menos buenas, más o menos verdaderas, más o menos nobles, etc. El más y el menos de las cosas se deben en tanto se acercan o se alejan de aquello que ocupa el lugar máximo dentro de su categoría o especie. Santo Tomás ejemplifica que un objeto es caliente en tanto que se acerca al máximo grado de calor. Existe algo que por consiguiente es verdadero, bueno  y noble por excelencia. Aquello que ocupa el grado máximo en algún género es causa de todo lo que pertenece a dicho género, así como el fuego ocupa el grado máximo en el género del calor y es la causa del calor de las cosas. Por lo tanto existe un ser, que es causa del ser de la perfección de todo lo que existe. Este ser Máxima Perfección es Dios.


   Quinta vía, “Sobre el gobierno del mundo”. Observamos que algunas cosas carecen de conocimiento, como        por ejemplo los cuerpos naturales que obran hacia un fin y que lo consiguen sin tener conocimiento o inteligencia. Las cosas que carecen de conocimiento no tienden a un fin si no son dirigidas por alguien que tenga conocimiento e inteligencia. Por lo tanto debe existir un ser Omnisapiente por el cual las cosas son dirigidas hacia un fin. Este ser Máxima Inteligencia es Dios.

P.U.E. 5º - UNIDAD II

 Falacias, ¿qué son?
Una falacia es un razonamiento o un argumento no válido o incorrecto pero con apariencia de razonamiento correcto. Es un razonamiento engañoso o erróneo (falaz), pero que pretende ser convincente o persuasivo.

Todas las falacias son razonamientos que vulneran alguna regla lógica. Así, por ejemplo, se argumenta de una manera falaz cuando en vez de presentar razones adecuadas en contra de la posición que defiende una persona, se la ataca y desacredita: se va contra la persona sin rebatir lo que dice o afirma.

Las falacias lógicas se suelen clasificar en formales y no formales. Desarrollaremos solo las no formales.
Falacias no formales o informales

Las falacias no formales son razonamientos en los cuales lo que aportan las premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas, lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.

La lista de falacias no formales es larga; algunas son las siguientes.
 Falacia ad hominem (Dirigido contra el hombre)
Razonamiento que, en vez de presentar razones adecuadas para rebatir una determinada posición o conclusión, se ataca o desacredita la persona que la defiende.


Ejemplo:
"Los ecologistas dicen que consumimos demasiado energía; pero no hagas caso porque los ecologistas siempre exageran".
Esquema implícito:
A afirma p,
A no es una persona digna de crédito.
Por lo tanto, no p.

Falacia ad baculum (Se apela a la fuerza o al bastón)
Razonamiento en el que para establecer una conclusión o posición no se aportan razones sino que se recorre a la amenaza, a la fuerza o al miedo. Es un argumento que permite vencer, pero no convencer.

Ejemplo:
"No vengas a trabajar a la tienda con éste piercing; recuerda que quién paga, manda".
Esquema implícito:
A afirma p,
A es una persona con poder sobre B.
Por lo tanto, p.

Falacia ad verecundiam (Se apela a la autoridad)
Razonamiento o discurso en lo que se defiende una conclusión u opinión no aportando razones sino apelando a alguna autoridad, a alguna persona famosa.
Es preciso observar que en algunos casos puede ser legítimo recorrer a una autoridad reconocida en el tema; pero no siempre es garantía.



Ejemplo:                                                    
"Según el alcalde, lo mejor para la salud de los ciudadanos es asfaltar todas las plazas de la ciudad"

A afirma p,
A es un experto o autoridad.
Por lo tanto, p.

Falacia ad misericordiam (apelación a la misericordia, provocando emociones)
Razonamiento o discurso en el que se omiten las razones adecuadas y se exponen razones no vinculadas con la conclusión pero que se sabe serán aceptadas por el auditorio, despertando sentimientos y emociones. Es una argumentación demagógica o seductora.


Ejemplo:
"Tenemos que prohibir que venga gente de fuera. ¿Qué harán nuestros hijos si los extranjeros los roban el trabajo y el pan?"
Esquema implícito:
A afirma p,
A presenta contexto emocional favorable.
Por lo tanto, p.

Falacia ad ignorantiam ( se apela a la ignorancia)
Razonamiento en el que se pretende defender la verdad (falsedad) de una afirmación por el hecho que no se puede demostrar lo contrario.


Ejemplo:
"Nadie puede probar que no haya una influencia de los astros en nuestra vida; por lo tanto, las predicciones de la astrología son verdaderas"
Extraído del libro: PIÑERO, Albert. "Logomàquines" Barcelona: Rape, 1999
Esquema implícito:
Se niega (se afirma) p,
No tenemos pruebas que p se verdadero (falso).
Por lo tanto, p es falso (verdadero
).

Falacia Post hoc... (Falsa causa)
Razonamiento que a partir de la coincidencia entre dos fenómenos se establece, sin suficiente base, una relación causal: el primero es la causa y el segundo, el efecto. Clásicamente era conocida con la expresión: "Post hoc, ergo propter hoc" (Después de esto, entonces por causa de esto).


Ejemplo:
"El cáncer de pulmón se presenta (frecuentemente) en personas que fuman cigarrillos; por lo tanto, fumar cigarrillos es la causa de este cáncer"
Esquema implícito:
Se da X,
acto seguido se da Y.
Por lo tanto, X es la causa de Y.


Es preciso observar (como se observa en el libro de donde procede este ejemplo: PIZARRO, Fina. "Aprende a razonar". Barcelona: Alhambra, 1987) que si bien es un argumento falaz, no se puede establecer que la conclusión sea falsa; se llegó a esta conclusión por otras vías.
Para reflexionar, tomar conciencia, denunciar, participar activamente tendiendo a erradicar el problema de la trata de personas, ¡vamos que se puede! comienza por hacer tu pequeño, pero fundamental aporte al respeto.




 


Letra de la canción Prepárame la cena de Calle 13
 incluida en el disco Entren Los Que Quieran.

No soy un número ni parte de una cifra
Aunque se paga por igual la misma tarifa
Todos caminamos con la misma camisa
Sin prisa para mirar donde se pisa

No vale el tiempo pero valen las memorias
No se cuentan los segundos, se cuentan historias
La paciencia es lo que se cosecha
Mi calendario no tiene fecha

No estoy solo, ando con mis 5 sentidos
Acá el silencio se convierte en sonido
Todo lo malo que soñé lo toqué
Pero esta tan oscuro que el miedo no se ve

Yo me huelo lo que siento por eso presiento
Que dentro del circuito me queda poco tiempo
En el próximo tren yo me monto
Prepárame la cena que regreso pronto

Prepárame la cena que regreso pronto
Yo miro para afuera y miro para adentro
La reclusión es mi punto de encuentro
Me ubican dentro de lo marginal  

Pero en algún momento todos nos portamos mal  
 
Y quien determina lo bueno y lo malo  
Lo poco saludable y lo sano  
De lo crudo a lo cocido hay una larga diferencia  
Y cocinar término medio no es ninguna ciencia  
 
En esta vida me castigaste,  
Me robaste el tiempo, me re-cagaste  
Mi culpabilidad es como una pecera vacía  
Como juzgar al sol por salir de día  
 
Si mis tristezas te causan alegrías  
Es por que tus reglas son distintas a las mías  
Creo en todo lo que veo  
Y aunque soy ateo rezo pa' que nunca me pase algo feo  
 
Para soñar con mi partida y con tú llegada  
No me hace falta un matre con almohada  
Yo soy libre porque desde aquí yo vuelo  
Solo toca despegarse del suelo  
 
Prepárame  la cena que regreso pronto...